Cómo salir de deudas: 9 tips para lograrlo

Una deuda es la obligación de devolver algo. En este caso, hablamos de dinero. Las deudas financieras son la obligación de devolver una cantidad de dinero que nos han prestado. Esto algunas veces conlleva una tasa de interés, según el tipo de préstamo que hayamos solicitado. 

Es por ello que antes de asumir un compromiso de este tipo, debemos analizar si contamos con los recursos necesarios para poder cumplir con el plazo de pago pactado. 

Sin embargo, no podemos llamar deuda mala a todas nuestras obligaciones de pago. De hecho, cuando son bien manejadas, pueden resultar en aumento de patrimonio. Es allí donde se le considera deuda buena. Pero, si recién estás aprendiendo sobre finanzas personales, es mejor no arriesgarse demasiado.

En el caso de que ya hayas contraído alguna, ¡no te preocupes! Más adelante conocerás cómo salir de ella.

Beneficios de salir de deudas

Si estás leyendo esto es porque, de seguro, quieres gozar de los beneficios de estar libre de deudas. Por eso te diremos qué ganas al saldarlas: 

1. Vives sin estrés, mejora tu estado de ánimo e incluso tu autoestima, porque te muestra tu capacidad de salir adelante.
2. Te vuelves más disciplinado y aplicas esta determinación en otras áreas de tu vida.
3. Redescubres tu capacidad de ahorro y eres capaz de establecer metas con la seguridad de poder cumplirlas.
4. Trabajas tu fortaleza mental y cuidas más de tu patrimonio.
5. Alcanzas la anhelada libertad financiera, porque administras mejor tus recursos sin depender de otros y tienes dinero extra para ti.

Tienes más dinero disponible para invertir y tener ingresos pasivos.

Cuando hablamos de deudas podríamos pensar que todas son malas. Pero, tal como te adelantamos al principio, no siempre es así. Para entender cuándo nos conviene adquirir una, ahondemos en los tipos de endeudamiento:

Deudas garantizadas

Son aquellas que adquieres y que tienen una garantía en caso de que no cumplas con el pago. Son las relacionadas con los créditos hipotecarios, cuya garantía reside en la propiedad, o un crédito automotriz donde las instituciones financieras pueden reclamar el vehículo en caso de no hacer el pago mensual de las cuotas acordadas.

Básicamente, son deudas que de no pagarlas, pierdes el patrimonio que adquiriste. 

Deudas no garantizadas 

Este tipo de deudas tienen tasas de interés que se aplican al no cumplir con el pago de la deuda o por cancelar solo el pago mínimo, como en el caso de las tarjetas de crédito. Además, pueden traer consecuencias legales y una calificación negativa en el Buró de Crédito, algo que te puede impedir optar por un nuevo préstamo personal en un futuro debido a tu mal historial crediticio. 

A estos dos tipos podríamos sumar las deudas buenas, que son las que aumentan tu patrimonio, como es el caso de las inversiones, porque te dejan rendimientos que te servirán para cubrir el pago de las deudas. 

Y las deudas malas, que son aquellas que solo te empobrecen al no aportar ganancias sino cuentas por pagar. Por ejemplo, comprar ropa a cuotas o pagar las vacaciones con un préstamo.

Ahora viene la parte que estabas esperando, en la siguiente subsección hablaremos de esas recomendaciones que debes seguir para liberarte de las deudas. ¡Sigamos!

Salir de deudas está genial, pero ahora imagina no tener que entrar en ellas nunca. Suena mejor, ¿cierto? ¡Acá te contamos cómo evitar las deudas y mejorar tu poder adquisitivo para vivir sin preocupaciones de tipo monetario! 

1. Evalúa tus finanzas personales 

Ten en cuenta los objetivos y estrategias que puedes llevar a cabo para alcanzar una buena salud financiera y enfócate en ellos para lograrlo. 

2. Crea disciplina y responsabilidad sobre el uso del dinero 

Una manera de tener estos dos puntos en orden es planeando conscientemente en qué gastas el dinero que produces. Una buena práctica es hacer un presupuesto y seguirlo a lo largo del tiempo.

3. Crea el hábito de ahorrar dinero 

Destina al menos el 10% de ingresos mensuales al ahorro y colócate metas. Por ejemplo, si quieres tomar vacaciones, planéalas con tiempo y comienza a ahorrar para ello en lugar de endeudarte. Puedes leer nuestro artículo sobre cómo ahorrar dinero si deseas profundizar. 

4. Edúcate financieramente 

La educación financiera te ayudará a entender cómo funciona el dinero y cómo puedes manejarlo para hacerlo rendir a tu favor, además de mostrarte alternativas para hacer crecer tu capital.

5. Lleva un registro de gastos 

Esto hará que tengas claro cuánto debes y no pasarás por alto las fechas de pago ni dejarás acumular las deudas. Además, el registro de gastos te permitirá darte cuenta en qué gastos innecesarios estás incurriendo para que frenes.

6. Evita los préstamos personales 

Este tipo de deuda es un arma de doble filo, porque te sacan de un apuro momentáneo pero te llevan de nuevo al espiral de las deudas. En la mayoría de los casos, conllevan tasas de interés muy altas que hacen que tus obligaciones se extiendan a largo plazo. 

7. Invierte al menos el 10% de tus ingresos 

Esto te dará rendimientos y tendrás una entrada de dinero adicional para cubrir tus imprevistos. Una buena opción es invertir en crowdfunding, pues resulta muy rentable a la hora de conseguir un retorno del capital invertido. Solo debes escoger una plataforma que te ofrezca diversas opciones de empresas para financiar, como es el caso de Arkangeles. 

¿Listo para aplicar estos consejos y trabajar en pro de tu libertad financiera? ¡Esperamos que sí! No olvides que si buscas dónde invertir, somos la mejor opción para iniciarte con una inversión mínima de 3.000 pesos mexicanos.